En definitiva este anime me va a
causar muchos dolores de cabeza porque no tengo absolutamente nada en mi repertorio
con qué compararlo adecuadamente y eso me encanta, acepto el desafío de
reseñarlo, aquí están mis primeras impresiones:
En general, estoy muy limitada de
información porque los estudios Lunch Box y Studio Elle son
nuevos en la industria, siendo Gibiate su primer anime original, así que
tampoco existe un manga o novela para tener de referencia… muy astutos. Al menos
puedo reconocer el nombre de su director, el señor Yoshitaka Amano quien
es reconocido mundialmente por diseñar a los personajes de Final Fantasy,
explico:
El señor Amano fue el que
creó los diseños de personajes de Gibiate plasmando su estilo personal
que consiste en líneas finas, tez pálida que reflejan tristeza y movimientos
sueltos para el cabello y ropa, también su preferencia por la acuarela y
tinta china; al ver esta primera emisión me recordó a Jojo´s Bizarre Adventure
por las expresiones faciales toscas y remarcadas para luego descubrir que Masahiko
Komino está en el equipo, él es conocido por ser el diseñador de personajes
de Jojo´s: Stardust Crusaders y quien en Gibiate se encargó de adaptar
los diseños del señor Amano a la animación.
Asimismo, puedo destacar panoramas
extensos y detallados, gran variedad de fotografía que me atrevo a decir, supera
en cantidad a un anime promedio junto a una paleta de colores neutra que
tiende a las tonalidades frías. Me gustó el deseño de los monstruos aunque no
tanto su formato en 3DCG porque hace desentonar demasiado a los personajes 2D, sin
mencionar que la calidad de animación en secuencias de acción es deficiente…
ya veremos cómo lo manejan.
Por otro lado, este primer
capítulo fue algo agotador al ser revelada mucha información que será necesaria
para comprender el resto de la trama, puede correr el riesgo de ser aburrida
para quienes no están acostumbrados a analizar o simplemente no disfrutan de
este género tan complicado que les explicaré: dentro del género de la ciencia
ficción existe un subgénero llamado ciberpunk y dentro de ese
subgénero existe el biopunk.
El subgénero biopunk habla
sobre la manipulación genética y sus estragos que afectan tanto a los individuos
como a su flora y fauna, puede ser una distopía causada por el cambio climático
o como en el caso de Gibiate, un ecosistema alterado por la acción
del hombre. Una de las característica del biopunk es que sus historias
pueden situarse en el futuro, presente o hacer un anacronismo.
Un anacronismo se refiere a una
persona u objeto que no corresponde a su época para lo cual existen 2 tipos: el
primero se llama procronismo (individuo u objeto del futuro que es
colocado en el pasado), y el segundo llamado paracronismo que consiste
en situar hechos, individuos o cosas del pasado en el futuro, razón por la
que en Gibiate podemos ver a un samurái y un ninja del periodo Edo en el
año 2030. Siendo así, el género correcto para clasificar a este anime es biopunk
paracronístico… por esto me duele la cabeza.
Ahora, el opening de este anime
solo es un instrumental folclórico japonés y el ending se llama “Endless”
interpretado por Maki Ohguro que ya se encuentra disponible en su
versión completa y estoy segura de que entrará en alguna parte de los conteos
musicales, les recomiendo no saltárselo por nada del mundo.
En conclusión, poco o nada
sabemos de Gibiate, no obstante, ha demostrado tener una propuesta única
en cualquier repertorio que yo estaré más que complacida en ver y coleccionar. El
apartado técnico tiene algunos fallos que se compensan por sí mismos, aunque de
ser exitoso o no dependerá de su desarrollo argumental… bastante interesante, ya
quiero saber que más tiene para ofrecer.
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